Mundomar fue escenario de un romántico momento en el que un enamorado pidió matrimonio a su novia, y por supuesto, contó con la ayuda de los delfines para convencerla de que él es el hombre con el que compartirá su vida, lo que ella no declinó, a pesar de los nervios que retrasaron su respuesta.
Todo estaba preparado para que Elisabeth recibiera una de las mayores sorpresas de su vida. Lo que se inició como un día de visita a Mundomar se iba a convertir en algo decisivo para el futuro. Alpha, uno de los delfines sería el encargado de traer el anillo, siendo cómplice de una historia de amor que hizo las delicias de los asistentes al parque.
El momento propicio y una música adecuada hicieron el resto. El personal del parque se movía de un lado a otro a una velocidad frenética para que cuando Elisabeth saliera al escenario todo pareciese normal. Ella creía que estaba participando en el programa educativo que tiene lugar en el delfinario.
La organización llevó varias semanas ya que los trabajadores del parque querían que todo saliese a la perfección. Cuando por fin llegó el momento y Juan Miguel, nervioso como un flan salió del galeón del delfinario con su micrófono es la mano, ella no se lo podía creer. Empezó a hablar y todos en el delfinario guardaron silencio, incluso los delfines. El público ansioso, esperaba una respuesta que tardaba en llegar porque la emoción impedía que se escuchara. El speaker tuvo que pedir, por favor, que todos querían escuchar la respuesta, y finalmente, la novia dijo si, cuando guardaron un silencio que los aplausos tardaron poco en irrumpir, al tiempo que todos les desearon un futuro feliz.
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buenas. Somos juan miguel y elisabeth nos gustaria saber si alguien de los que estuviero ese dia tiene fotos o videos y nos los pudera pasar. Muchas gracias la direccion es: marinjuanmiguel@hotmail.com